lunes, 30 de septiembre de 2013

EL INCIDENTE PUERIL QUE SIMON BOLIVAR NUNCA OLVIDO

Durante más de una década, desde que se uniera al movimiento independentista de la primera república venezolana (1810) hasta la batalla de Ayacucho (1824) que pusiera fin en América del Sur al poder español, Simón Bolívar combatió activamente —ya con la espada, ya con la pluma— al régimen colonial encarnado durante ese tiempo en la persona del rey Fernando VII, a quien se tiene como uno de los más torpes y despóticos de los monarcas de la historia contemporánea.
Si difícil y accidentada fue la vida del hombre a quien media docena de naciones reconocen como Libertador, no lo fue menos la de su principal adversario, el soberano que desde muy joven sufrió exilio y prisión en la Francia napoleónica y a quien, en dos ocasiones, le impusieron una constitución liberal que su corazón absolutista rechazaba. Sería, además, durante su reinado que España habría de perder su vasto imperio colonial en América, con excepción de Cuba y Puerto Rico.
Aunque esa sangrienta contienda por la independencia contó con muchos próceres, desde México hasta la Argentina, ninguno representó más la oposición al rey, con más empeño, constancia y denuedo, que Bolívar. Y a luchar contra Bolívar el rey Fernando envió a América del Sur sus mejores generales y soldados. No sería exagerado decir que, en su momento de mayor encono, esa contienda podría verse como un duelo gigantesco entre los dos hombres, tal vez una continuidad del que en una ocasión, de adolescentes, los enfrentara en un campo de juego.
El joven Simón Bolívar. (Anónimo/Fundación John Boulton, Caracas/Wikimedia Commons) No había cumplido aún los 16 años el joven Simón cuando, de visita en Madrid, acompaña a su tío materno Esteban Palacio —quien tenía un puesto administrativo de importancia y grandes relaciones en la corte— al Palacio de Aranjuez, donde en esos días (junio de 1799) veraneaba la familia real. En algún momento, el chico venezolano fue invitado a jugar volante con Fernando, entonces príncipe de Asturias, que sólo tenía 14 años.
Desde el siglo XVII, el juego de volante, o Jeu de Volant, había sido un pasatiempo de la clase alta en muchos países europeos, aunque su origen, con las variantes propias de época y lugar, se remontaba a la antigüedad clásica. Por el tiempo en que Bolívar jugó con el heredero del trono de España, era usual un partido entre dos personas que le pegaban hacia atrás y hacia adelante a una pelota de caucho emplumada (antecesora de la pelota de bádminton) con un bate (no con una raqueta) tantas veces como pudieran sin que la pelota llegara a tocar el suelo. Era un deporte sencillo, pero agotador, que —de la misma manera que ocurre hoy con el tenis— exigía gran destreza y resistencia de quienes lo practicaban.
Fernando VII de España. (Vicente López/Wikimedia Commons) Al parecer el joven Bolívar no le dio sosiego a su rival que, por el contrario, esperaba que lo dejaran ganar el partido, a lo que quizás lo tuviesen acostumbrados sus otros contrincantes deportivos que lo adulaban. De repente, un pelotazo de Simón le arrancó el sombrero al príncipe, que respondió con una auténtica rabieta y la exigencia de que su rival se disculpara, a lo que éste se negó por no creer que hubiese hecho nada que contraviniese las reglas del juego. Intervino entonces la reina, María Luisa de Parma, que le negó la razón a su hijo, a quien le advirtió que, en lo adelante, se ajustara mejor el sombrero. La pequeña crisis quedó zanjada sin que mediaran disculpas de parte del muchacho criollo.
¿Asociaría Fernando VII al principal caudillo de las guerras de la independencia sudamericana con el mismo individuo que lo humilló de un pelotazo delante de la corte? ¿Se acordaría de la escena pueril y de la afrenta que él tomó tan a pecho y que seguramente jamás perdonaría a la hora de enviar generales y ejércitos a luchar en América? ¿Sería esta larga guerra, en la que España perdería sus mejores colonias, una prolongación de aquel partido de volante por otros medios? Nunca llegaremos a saberlo.
Pero para Bolívar el incidente habría de ser, sin duda, un augurio y una reafirmación de su destino. Cuentan testigos que el Libertador recordaba vívidamente lo ocurrido aquel día en el Palacio de Aranjuez y sentenciaba con satisfacción:
—"¿Quién podría haberle profetizado a Fernando VII que era ésta una señal de que algún día yo iba a arrancarle la joya más valiosa de su corona?".

JUGO PARA DESINTOXICARSE

Crédito: Editorial MangoCrédito: Editorial Mango
Ingredientes:
2 naranjas
1 pera
4 ciruelas pasas remojadas en 1 taza de agua desde 5 horas antes, mínimo
1 y media cucharada de linaza molida
Procedimiento:
Exprime el jugo de las naranjas, vierte en la licuadora, añade la pera cortada en cubos y las ciruelas con la mitad del agua donde se remojaron, añade la cucharada y media de linaza y licua perfectamente. Vierte en un vaso y toma recién hecho, alternando, un día sí y un día no por dos semanas.
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viernes, 27 de septiembre de 2013

LA PAPAYA

La papaya es una fruta tropical perteneciente a la familia de las Caricáceas (carica papaya). De color amarillo cuando está madura, en su interior la pulpa es blanda y jugosa. En el centro, tiene abundantes semillas de color negro.
El primer dato que se tiene por escrito sobre la papaya aparece en la Historia Natural y General de las Indias, del historiador español Gonzalo Hernández de Oviedo y Valdés, quien alrededor del año 1535 envió una carta a su soberano, en la que describe haber visto esta fruta en el sur de México y Centroamérica. Durante la conquista, las semillas se distribuyeron rápidamente por las Antillas y Sudamérica. Posteriormente, los navegantes españoles y portugueses ya la habían distribuido en Malasia, Filipinas, Sur de China y Hawái.
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Debido a su enzima papaína, esta fruta es la reina del tratamiento de la indigestión y el buen funcionamiento intestinal. También te brinda fibra, calcio, fósforo, hierro y las vitaminas A y C, tiamina, riboflavina, niacina.

Beneficios de consumir las semillas

Protegen el riñón. En caso de problemas de insuficiencia renal, algunos estudios han encontrado que pueden proteger los riñones contra afecciones posteriores. En este caso, se recomienda masticar 7 semillas de papaya, 3 veces al día.
Mejoran la salud intestinal. Debido a su alto contenido de enzimas proteolíticas, las cuales pueden acabar con los parásitos y sus huevecillos, son un excelente antiparasitario intestinal. También contienen un alcaloide antihelmíntico único llamado carpaine, eficaz para exterminar las amebas. Para su consumo, se secan las semillas y se muelen: una cucharita de este polvo se pone a hervir en agua. Se le puede agregar una cucharadita de miel. Repetir 2 o 3 veces al día.
Favorecen el hígado. En casos de cirrosis hepática, pueden funcionar como un tratamiento alternativo. Deben molerse 5 semillas de papaya y a la mezcla se le añade una cucharada de limón. Debe consumirse 2 veces al día, por un periodo de un mes.
Cuidan el sistema digestivo. Tienen propiedades antibacterianas y antiinflamatorias. Estudios demuestran que el extracto de las semillas mata la salmonella, los estafilococos y otras infecciones. Para estos casos, se recomienda masticar muy bien 7 semillas, 3 veces al día.
Queman grasa. Tienen la cualidad de impedir que el organismo absorba en exceso grasas y azúcares. Otro punto favorable es que aceleran el proceso de digestión, lo que se traduce en la pérdida de algunos gramos de sobrepeso.

jueves, 19 de septiembre de 2013

EL SESAMO NEGRO

La planta de sésamo (Sesamun Indicum) pertenece a la familia de las oleaginosas. Se le conoce también como ajonjolí, alegría y/o haholí. Su cultivo es milenario. Hay quienes aseguran que es el condimento más antiguo del mundo. Sus semillas eran muy apreciadas en Mesopotamia, India, Egipto China y Grecia, como condimento y alimento energético y exquisito. Los hindúes utilizaban su aceite en diversas ceremonias religiosas de purificación.
Sésamo negro, una excelente fuente de proteínas / Foto: ThinkstockSésamo negro, una excelente fuente de proteínas / Foto: Thinkstock
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Dentro de esta planta existen variedades. De acuerdo a ellas, las semillas que se obtienen pueden variar de color, siendo blancas, rojas, marrones y negras. Estas semillas son muy utilizadas para preparar desde salsas, hasta postres en la gastronomía Asiática y del Medio Oriente; sin dudad, añaden un delicado y exótico sabor a los platillos además de enriquecerlos.
Las semillas de sésamo negro son ricas en ácidos grasos, compuestos fenólicos, antioxidantes, vitaminas y fibra dietética. Su contenido en hierro, fósforo, magnesio, cobre y cromo, la convierten en un complemento que mineraliza nuestro organismo.
Te puedo comentar que 100 gramos de semillas de sésamo te ofrecen:
- 598 calorías
- 58 gr. de grasas insaturadas (saludables)
- 20 gr. de proteínas
- 670 mg. de calcio
- 10 mg. de hierro
- 5 mg. de zinc
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El consumo del sésamo negro puede brindar beneficios a tu salud, tales como:
- Con su aporte de lecitina, ayuda a reducir y controlar los niveles de colesterol en sangre.
- Al ser una gran fuente de hierro, es recomendado para personas con anemia, o bien, para mujeres durante el embarazo y la lactancia.
- Es alto en contenido de calcio, por lo que ayuda a fortalecer la masa ósea y previene la osteoporosis.
- Aminora la rigidez en las articulaciones.
- La medicina oriental recomienda consumirlas de manera regular, ya que actúan en la recuperación del color original del cabello, de las personas con canas.
- Al favorecer la oxigenación del cerebro y fluidificar la sangre, actúa previniendo la arterosclerosis.
- Al contener fibra, su consumo mejora la función intestinal.
- La medicina china lo utiliza para lubricar el hígado, el corazón, los riñones, el páncreas y los pulmones.
- Es una gran fuente de proteínas de muy buena calidad.
- En mujeres que están experimentando síntomas desagradables asociados con la menopausia, el sésamo restaura los patrones del sueño.
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Estas pequeñas semillas tienen un agradable sabor a nuez y la dosis aconsejada es de 2 cucharadas al día. Su consumo es muy variado, pues lo puedes espolvorear en pastas, ensaladas y frutas, a excepción de los cítricos. Puedes también añadirlo a pan o galletas. Lo más aconsejable es comer estas semillas crudas o levemente tostadas. Al tostarlas, la temperatura no debe ser muy alta, ya que la calidad de sus grasas se puede alterar. Molido se optimiza su absorción y asimilación.
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Aquí una sencilla receta para preparar “Salmón al Sésamo Negro”:
Ingredientes: salmón en trozos, sésamo negro, aceite de oliva, sal y pimienta.
Modo de preparar: en una sartén precalentada a fuego lento, se añade un poco de aceite de oliva, se colocan los trozos de salmón y se voltean con frecuencia para freírlos uniformemente; se agrega sal y pimienta al gusto, además de espolvorear con el sésamo negro. Cuando están listos, se sirven y se pueden acompañar con arroz salvaje y una ensalada verde.
Espero les guste y añadan a sus alimentos el sésamo negro.
¡Recuerda… tú generas el cambio!

lunes, 9 de septiembre de 2013

UNA VIRTUD MAS DEL LIMON

Además de darle sabor a tus ensaladas, a tus postres y a tus bebidas, el limón tiene otro tipo de virtudes: es un poderoso limpiador y desinfectante, gracias a su gran concentración de ácido, y es también desengrasante. Todo esto en una pequeña fruta de solo cuatro centímetros de diámetro, que no solo te permitirá ahorrar dinero sino también, hacerle un gran favor a nuestro planeta.

domingo, 8 de septiembre de 2013

EMILIANO ZAPATA

Emiliano Zapata nació en el seno de una familia campesina y fue hijo de Gabriel Zapata y Cleofas Salazar.1 Su infancia se desarrolló en el contexto del latifundismo porfirista en Morelos. Realizó sus primeros estudios con el profesor Emilio Vera, quien había sido un viejo soldado juarista. Pronto trabajó como labrador y arriero. En 1906 asistió a una junta de campesinos en Cuautla para discutir la forma de defender sus tierras y las del pueblo frente a los hacendados colindantes. Su rebeldía lo condenó a la leva (conscripción), y en 1910 Zapata fue incorporado al 9° Regimiento de Caballería, en Cuernavaca. Zapata fue asignado como caballerango de Pablo Escandón, Jefe del Estado Mayor de Porfirio Díaz, tras lo cual fue trasladado a cumplir las mismas funciones bajo el mando de Ignacio de la Torre, yerno de Díaz, quien le tomaría especial afecto por su destreza con los caballos.
El motivo por el que se incorporó a Emiliano Zapata al ejército fue el hecho de que había raptado a una jovencita, ya que Zapata era conocido por ser un hombre muy enamoradizo.2 La acusación la puso el padre de Inés Alfaro Aguilar, joven con quien tiempo después Zapata tendría dos hijos: Nicolás y Elena Zapata Alfaro. En la fotografía en la que Zapata aparece junto a Villa sentado en la silla presidencial, el niño más pequeño que se asoma es Nicolás. También según el historiador Jesús Sotelo Inclan, Zapata se casó con una joven de clase acomodada llamada Luisa Merino y al caer la dictadura porfirista, el 20 de agosto de 1911 contrajo matrimonio con la señorita Josefa Espejo Sánchez conocida como “La Generala” originaria de Anenecuilco, hija de don Fidencio Espejo y Guadalupe Sánchez Merino con quien procreó dos hijos más. El primero tuvo por nombre Felipe; éste nació en el cerro El Jilguero y murió a la edad de cinco años en uno de los tantos refugios que como familia tuvieron luego de ser mordido por una víbora de cascabel. La segunda hija fue Josefa; ella nació en Tlaltizapán y un año antes que su hermano Felipe murió a consecuencia de una picadura de alacrán. Así Josefa quedó sin hijos en poco tiempo. Sin embargo, Zapata tuvo más hijos como es el caso de Ana María Zapata, hija de Petra P. Torres.
En septiembre de 1909 Emiliano Zapata fue elegido calpuleque (palabra náhuatl, que significa jefe, líder o presidente) de la junta de defensa de las tierras de Anenecuilco, donde empezaría a analizar documentos que se originaron en el virreinato que acreditaban los derechos de propiedad de los pueblos sobre sus tierras, los cuales habían sido negados por las Leyes de Reforma, sobre todo la Ley Lerdo que obligó a las corporaciones civiles a vender o ser expropiadas las tierras improductivas, lo cual fue motivo en su tiempo del apoyo de varios líderes indígenas como Tomás Mejía a los gobiernos conservadores mexicanos y al Segundo Imperio Mexicano. Estas leyes además fueron aprovechadas por varias personas para acrecentar sus tierras de manera ilegal al solicitar la propiedad de zonas comunales que los pueblos no trabajaban. Por esto se convertiría, de esa manera, en dirigente agrario de Morelos, su estado natal. Su primera aparición política ajena a su mundo campesino fue en las elecciones para gobernador de Morelos en 1909, cuando apoyó al aspirante de la oposición, Patricio Leyva, en contra del de los latifundistas, Pablo Escandón y Barrón.
En el mes de mayo de 1910 recuperó por la fuerza las tierras de Villa de Ayala, que eran protegidas por el jefe de policía, José A. Vivanco, y que dejó en posesión de los campesinos del lugar. Por este hecho tuvo que escapar varias veces del gobierno, pues fue declarado bandolero. Algunos meses después participó en la reunión que se celebró en ese mismo lugar, es decir, en Morelos)|Villa de Ayala]], con objeto de discutir lo que después se convertiría en el Plan de Ayala.



lunes, 2 de septiembre de 2013

NAHUAL

Nahual o Nagual en las mitologías mesoamericanas es un elemento del individuo que se considera un vínculo con lo sagrado, y que por ello es sagrado él mismo. El concepto se expresa en diferentes lenguas significando algo similar a "interior" o "espíritu"1 Más comúnmente, entre los grupos indígenas se denomina nahualismo a la práctica o capacidad de algunas personas para transformarse en animales, elementos de la naturaleza o realizar actos de brujería.2 Etimológicamente significa lo oculto, lo escondido, lo interior.3 En maya el concepto se expresa bajo la palabra "Chulel" que se entiende precisamente como espíritu,4 la palabra deriva de la raíz "chul" que significa divino.5
De acuerdo con algunas tradiciones, se dice que cada persona, al momento de nacer, tiene ya el espíritu de un animal, que se encarga de protegerlo y guiarlo, estos espíritus, llamados nahuales, usualmente se manifiestan sólo como una imagen que aconseja en sueños o con cierta afinidad al animal que nos tomó como protegidos. Una mujer cuyo nahual fuera un cenzontle tendrá una voz privilegiada para el canto, pero no todos tienen un contacto tan leve: se cree que los brujos y chamanes del centro de Mesoamérica pueden crear un vínculo muy cercano con sus nahuales, lo que les da una serie de ventajas que ellos saben aprovechar, la visión del gavilán, el olfato del lobo o el oído del ocelote pasan a ser herramientas de estos videntes e incluso se afirma que algunos, más preparados, pueden hasta adquirir la forma de sus nahuales (véase Teriantropía) y utilizar esta habilidad de diversas formas, no todas ellas bienintencionadas, según la tradición popular.